“La patria es la patria, y ante el deber de defenderla se debe despojar de todo interés, incluso el de la propia existencia”
Federico Basadre Grohmann
Hoy, 26 de octubre, conmemoramos en el Perú el día del veterano de guerra y de la pacificación nacional, justo reconocimiento a aquellos que, para defender la soberanía la independencia y la integridad territorial, participaron en los distintos teatros de operaciones, dispuestos conscientemente a entregar lo más preciado que tiene el ser humano que es la vida, con el fin de preservar a la nación peruana y a las futuras generaciones.
Desde que los estados comprendieron la necesidad de dar seguridad a su población, al territorio que ocupa y a salvaguardar sus intereses y objetivos nacionales, se concibió la necesidad de contar con una fuerza en cantidad suficiente y con los medios necesarios para que cumplan con esta tarea a tiempo completo y nacen los ejércitos, fue en el imperio romano donde en la era del emperador Augusto (5 A.C.) por primera vez se dio una ley para organizar el Ejército y Marina, establecer el tiempo de servicios, honrar y asignar beneficios a las milicias y soldados regulares que habían participado en las diversas campañas, que consistía en entregarles una suma de dinero y un terreno para su uso, generalmente en las zonas conquistadas de España o África, esta disposición sobre todo la de la entrega del terrenos fue cayendo en desuso dependiendo del gobernante.
Pero el concepto fue acuñado muchos siglos después por otros estados que tuvieron guerras cruentas y, vieron en el veterano de guerra un ejemplo a seguir, y que al reconocer su sacrificio se fortalece con su ejemplo el amor a la patria y valores como la valentía, el coraje, el sacrificio y el deber, que todo ciudadano debe practicar. Es recién en el siglo XX al término de la I Guerra Mundial, que los gobiernos empiezan a darse cuenta de la importancia que tiene para la nación honrar a sus veteranos de guerra, sobre todo a los que habían sufrido limitaciones físicas y psicológicas por el combate. En alguno países se declaró feriado nacional para conmemorar a su veteranos, en otros, solo feriado laborable, pero siempre con ceremonias a lo largo del país, pues al conmemorar este día se inspira a las futuras generaciones a apreciar el sacrificio que hicieron los veteranos de guerra para cumplir con su deber.
La República del Perú, desde su nacimiento, vislumbró que al compartir límites con cuatro países, requeriría de un Ejército y de una Marina, creándolas y dándoles medios para el cumplimiento de sus tareas, los conflictos armados internacionales no tardearon en llegar y tuvimos enfrentamientos, primero para consolidar nuestra independencia con diversos enfrentamientos navales y terrestres que culminaron con la victoria en Ayacucho en 1824, luego fue la guerra contra la Gran Colombia en 1828, contra Bolivia en 1841 y posteriormente contra Chile en 1879; no existe en nuestra historia del siglo XIX ningún reconocimiento de los gobiernos a los veteranos de estas guerras con algún tipo de beneficio económico, salvo reconocimientos del gobierno y sobre todo de las municipalidades a los sobrevivientes otorgándoles medallas, diplomas y desfiles. Con el tiempo muchos de ellos terminaron sus días en la mendicidad, en condiciones precarias.
Es solo después de la campaña de 1941 contra el Ecuador, donde participaron las Fuerzas Armadas, apoyados por reservistas y jóvenes voluntarios que salieron al frente por el llamado de la patria, alejados de sus familias, quedando heridos o muertos en combate; posteriormente, se creó la “Asociación de Vencedores de la Campaña Militar de 1941” que consiguió que las instituciones armadas otorguen una pensión a todos los reservistas que participaron en el conflicto así como bonificaciones a los oficiales y personal que participaron en el conflicto armado, pensiones y bonificaciones que con el transcurrir de los años fueron perdiendo su valor adquisitivo.
Es recién en 1984 durante el gobierno del Presidente Fernando Belaunde Terry que se da la Ley 24053, reconociendo a la Asociación de Vencedoras de la Campaña Militar de 1941 y establece que el personal que haya sido calificado como vencedor de la Campaña Militar 1941, recibirá sin excepción, a través del sector en el cual prestaron servicios, una bonificación mensual equivalente a un sueldo mínimo vital vigente, atención médica y medicinas gratuitas, en todos los hospitales de las Fuerzas Armadas, Fuerzas Policiales, del Ministerio de Salud y del Instituto Peruano de Seguridad Social, se les adjudicará gratuitamente y en forma permanente en todos los cementerios del país un nicho para recibir sus restos, tendrán trato preferencial en las gestiones para obtener vivienda propia y para la afectación de terrenos para fines agropecuarios, encargándose al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas la revisión de los expedientes del personal subalterno de las Fuerzas Armadas y Fuerzas Policiales, que hasta la fecha no hayan merecido la calificación.
En el 2021, esta ley es modificada con la Ley 24053, incorporándose a los excombatientes de las Fuerzas Armadas de la lucha contraterrorista, que participaron en el proceso de Pacificación Nacional entre los años 1980-2000. Los beneficios de esta ley, se hicieron extensivos a los excombatientes del conflicto de 1933, con igual derecho les asiste a los excombatientes de los conflictos de los años 1978, 1981 y 1995, calificados como Defensores de la Patria por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y a los excombatientes de la lucha contra el terrorismo, que cuenten con parte de guerra formulado en su oportunidad y hayan calificado como Defensores de la Democracia; mediante la Ley 31177 también se incluyó la prioridad para acceder a los distintos servicios que brinda el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo a través de sus programas, conforme a los convenios de cooperación que el Ministerio de Defensa deberá celebrar con el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo. En el caso de los licenciados que participaron en el proceso de Pacificación Nacional en la lucha contra el terrorismo entre los años 1980-2000, se tendrá en consideración esta situación, para efectos de las evaluaciones médicas de audiometría, oftalmología y psicología que les realice el Ministerio de Trabajo.
La Ley 30826 del 20 julio 2018 estableció, que los veteranos de guerra y de la pacificación nacional en situación de retiro o licenciados, mantengan su sentido de pertenencia al instituto armado o policial en el que prestaron servicios, y por finalidad abstracta que su ejemplo de valía y patriotismo se proyecte a la población en general, y a las futuras generaciones de miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional. Declaró el día 26 de octubre como fecha destinada a honrar y reconocer el valor y patriotismo de los miembros de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional que participaron en los conflictos armados en defensa de la soberanía nacional y en el proceso de pacificación nacional, lucha contra el terrorismo y defensa de la democracia. Hoy, en el Día del Veterano de Guerra y de la Pacificación Nacional se rinde justo homenaje en todo el país, a aquellos miembros de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional que cumplieron con su deber, con honor, valentía y coraje para que la nación peruana se perpetúe en el tiempo. Son nuestros héroes contemporáneos que defendieron el honor nacional y nos permitieron vivir en democracia y en paz.
Autor: Capitán de Navío (R) José Antonio Sifuentes Espinosa, docente facilitador de la Escuela Superior Conjunta de las Fuerzas Armadas
Bibliografía
- Scott Coleman Allan “Honoring our heroes, the importance of veterans day” www.mthree.com
- Orellana Briceño María Soledad “Veteranos del 79 un pasado glorioso un presente en el olvido” orellana.pdf (revistamarina.cl)
- D.L. 24053 del 21/12/84 “Denomina Campaña Militar de 1941”
- D.L. 31177 25/04/21“.
- D.L. 20826 20/7/2018 “Ley del Veterano de Guerra y de la Pacificación Nacional”.