El 17 de diciembre de 1996, el grupo terrorista denominado movimiento revolucionario Túpac Amaru, al mando de su líder Néstor Cerpa Cartolini, realizó una incursión en la residencia del Embajador del Japón cuando celebraba una recepción para 500 autoridades políticas, militares y delegaciones diplomáticas de diferentes Países; la finalidad de esta acción terrorista era presionar al gobierno peruano exigiendo la liberación de 400 de sus militantes condenados por delitos de terrorismo. Es obvio que este hecho extremista tuvo una repercusión a nivel mundial, situación de crisis que el nivel estratégico representado por el gobierno de turno del Perú conformado por el presidente de la República, autoridades políticas y militares de este nivel, asumieron su responsabilidad y tomaron la decisión política de hacer frente a esta crisis; adoptando inicialmente la disuasión la estrategia para así solucionar el problema sin hacer el empleo de la fuerza, sino mediante negociaciones y conversaciones a cargo del ministro de Educación y su equipo de trabajo, sin embargo, en forma simultánea se realizaba el planeamiento y la preparación de una operación militar denominada “Chavín de Huántar” cuyo objetivo político era “rescatar con vida a los rehenes capturados y neutralizar las fuerzas terroristas”, que se constituyó en el propósito y la guía estratégica del nivel político que facilitó el planeamiento, preparación y conducción de la operación en términos de fines, modos y medios en todos los niveles.
El 22 de abril de 1997 la Fuerza de Tarea de intervención contraterrorista organizada para tal efecto, dio inicio a un operativo sin precedentes en la historia militar de nuestro país que se constituye -sin duda alguna- en un motivo de orgullo para todos los peruanos. Esta importante fecha nos permite recordar la operación más exitosa de todos los tiempos, que nos llena de orgullo por el reconocimiento a nivel mundial de este tipo de operaciones especiales, que después de un análisis profundo y desde el punto de vista de la interoperabilidad y el accionar conjunto podemos apreciar -a no dudarlo- el comportamiento y las responsabilidades en los tres niveles de planeamiento y conducción de las operaciones que pregona nuestra doctrina conjunta. El nivel estratégico, representado por las autoridades políticas y militares de la época, la fuerza de tarea conjunta, por llamarla de esta manera, con la participación de los tres institutos y la policía nacional, así mismo, la participación de otros actores externos e internos, que se consideraron en el proceso de planeamiento y conducción de las operaciones, acorde con la doctrina conjunta y con la nueva forma de pensar y hacer la guerra en el marco del pensamiento conjunto, que imparte nuestra Escuela Superior Conjunta y que visualiza el empleo eficaz y eficiente, integrado y sincronizado de los recursos o funciones conjuntas en términos de tiempo, espacio y fuerza para maximizar el poder de combate y aplicarlo en el momento y lugar adecuado para dislocar al enemigo y lograr con éxito el cumplimiento de la misión; podemos afirmar que este excelente grupo humano aplicó correctamente la doctrina de acuerdo a las circunstancias, situaciones e influencias que se presentaron
La operación Chavín de Huántar, se constituye en la parte gloriosa de nuestra historia y los hechos considerados en esta exitosa operación conocida y admirada a nivel mundial, nos permite a mucha honra resaltar las capacidades, habilidades, destrezas, trabajo en equipo, compromiso, resiliencia, liderazgo, valores y virtudes militares que este selecto grupo de hombres de nuestras fuerzas de elite, de las Fuerzas Armadas, Policía Nacional del Perú y otros actores de la sociedad peruana, que pusieron en práctica durante el proceso planificación, preparación y conducción de las operaciones, para contribuir y lograr con éxito el rescate con vida de los rehenes.
Dicha operación que nos llena de orgullo, indudablemente fortalece nuestro amor y compromiso para con nuestra Patria y comprender el verdadero valor de los soldados de la patria que se constituyen en la única profesión que da la vida por salvaguardar y defender los intereses nacionales así como garantizar la paz y tranquilidad de nuestra población; profesionales de la guerra que -poniendo en práctica lo aprendido en su etapa de formación y capacitación- realizaron una excelente planificación preparación y conducción de la operación logrando el éxito de la misma, alcanzando el objetivo previsto y el estado final deseado planteado. Este excelente grupo humano y su heroica misión permanece latente en nuestras mentes y en nuestros corazones, toda vez que nos dejaron una excelente operación digna de estudio y análisis, desde el enfoque de las operaciones conjuntas y a la luz de la doctrina del arte y diseño operacional, la preparación de inteligencia del ambiente operacional y del proceso de planeamiento conjunto, para extraer lecciones aprendidas en términos de aciertos y errores que nos permita un mejor entendimiento de la naturaleza de este tipo de operaciones y actualizar nuestra doctrina conjunta. Así mismo, se constituye en una de las herramientas educativas por excelencia para forjar lideres conjuntos y adaptables a las nuevas situaciones y retos que nos impone la evolución de la naturaleza de la guerra.
Desde un enfoque de las operaciones conjuntas, el comportamiento en las funciones conjuntas permitió lograr el éxito de la misión encomendada por el nivel político toda vez que fueron correctamente empleadas. En cuanto a la función conjunta de inteligencia en términos de capacidades y teniendo en cuenta la importancia de la inteligencia en todo tipo de operaciones particularmente en las operaciones especiales para conocer el espectro del conflicto, es decir el ambiente operacional, las capacidades de este grupo terrorista, su intención y forma de pensar y conducir sus operaciones, así como la participación de otros actores relevantes. Obviamente el comando y su estado mayor realizo una excelente identificación de los factores más importantes y significativos, que ha no dudarlo facilitaron la toma de decisiones del comandante de esta fuerza de intervención conformada por fuerzas de elite de las FFAA de nuestro país, en ese sentido el grupo de inteligencia contemplado en la organización orientó sus esfuerzos inicialmente en la búsqueda de información y requerimientos de inteligencia críticos del comandante para tener un entendimiento compartido del ambiente operacional y del enemigo, y facilitar la toma de decisiones durante el planeamiento y la conducción de las operaciones, del análisis realizado era fundamental garantizar el secreto de la operación empleando adecuadamente el compartimentaje y acciones clandestinas previas al día “D“, para facilitar el despliegue que permita una posición de ventaja y el ingreso a los alrededores de la residencia en seguridad, los efectos deseados y las tareas para lograrlos, particularmente estaban orientados a garantizar la construcción de los túneles por los mineros convocados para tal efecto, porque era vital que los terroristas no se percataran de este hecho toda vez que si esto sucedía se perdía el efecto de la sorpresa que era el principio fundamental para el éxito de la operación. Para minimizar este riesgo se movilizó personal y vehículos de escucha a inmediaciones de la residencia de la Embajada del Japón y desde donde se obtuvo las primeras informaciones de lo que acontecía al interior, pudiéndose determinar las intenciones y pretensiones de este grupo terrorista. Así mismo, se realizaron actividades de distracción para evitar que los sonidos producto de la construcción del túnel sean escuchados y detectados por los terroristas; por lo tanto, podemos concluir que la inteligencia gestionó adecuadamente la información y proporciono oportunamente un conocimiento útil de las capacidades, vulnerabilidades y actividades de los terroristas clarificando la situación, reduciendo la incertidumbre y facilitando la toma de decisiones.
En lo relacionado a la función conjunta de sostenimiento podemos mencionar que también fue fundamental para proporcionar el soporte a la estrategia planteada de solución al problema operativo militar, el equipamiento fue el más adecuado para el éxito de la operación, la construcción de una réplica de la embajada del Japón fue una condición necesaria para el proceso de entrenamiento y preparación de lo planeado, las prácticas permanentes permitieron lograr una sincronización en el tiempo y en el empleo de las capacidades y el desplazamiento de las fuerzas al interior de la residencia con el más mínimo detalle, lo que permitió proporcionar apoyo oportuno de logística, personal y sanidad, así como lograr por otra parte la interoperabilidad en el empleo de las capacidades de las fuerzas particularmente en lo que respecta a la función de comando y control que facilito una comunicación eficaz y flexible en tiempo real facilitando el ejercicio del comando, el control y evaluación permanente de la operación considerando también una comunicación con el interior de la residencia con la participación de algunos rehenes que facilitaron el conocimiento de las actividades de los terroristas.
El objetivo para esta operación otorgado por el nivel político fue claro y preciso, permitió tener una comprensión y entendimiento de lo que el nivel político quería que se haga en todos los niveles: “rescatar a los rehenes con vida”, este objetivo direccionó correctamente todos los esfuerzos y capacidades hacia una meta y un estado final deseado que se logró con el mínimo de perdidas ;en ese sentido el comando de la fuerza aplicando el ejercicio de comando en el marco del arte y diseño operacional logro el entendimiento compartido y una consciencia situacional disciplinada del problema operativo militar, esto fue fundamental para facilitar el proceso de planeamiento, la preparación y la ejecución de la operación. Para ello la función conjunta de comando y control también fue la más adecuada y flexible toda vez que permitió al comandante ejercer la autoridad respetando el principio de unidad de comando y de unidad de esfuerzos, facilito la integración y sincronización de todas sus capacidades disponibles en tiempo espacio y fuerza para en términos de sinergia lograr una posición de ventaja la cual se obtuvo gracias al factor sorpresa logrando el objetivo previsto en las mejores condiciones.
La preparación y el entrenamiento se constituye en una característica importante en este tipo de operaciones para lograr la integración, combinación y sincronización de las capacidades en tiempo espacio y fuerza , por lo que los comandos en todos los niveles asumieron con responsabilidad la importancia del entrenamiento y la preparación realizando todos los ensayos necesarios para lograr el empleo eficaz y eficiente de los recursos, motivo por el cual se construyó una réplica de la residencia lo que facilitó el entrenamiento para aplicar correctamente los principios de rapidez, sorpresa y contundencia, teniendo presente siempre que no existe maniobra sin engaño, este último es parte de la maniobra, por lo tanto permite el logro de la sorpresa y para ello es fundamental el secreto. Sun Tzu señalaba que: “toda guerra está basada en el engaño. por eso, cuando tengas capacidad, finge incapacidad; cuando estés activo muéstrate inactivo. cuando estemos cerca debemos hacer creer al enemigo que estamos lejos; cuando estemos lejos debemos hacerle creer que estamos cerca”; sintetizaba su pensamiento diciendo “finge inferioridad y estimula su arrogancia”.
Por otra parte, cabe resaltar la importancia de la participación de los medios de comunicación y de la opinión pública nacional e internacional en el planeamiento y conducción de las operaciones, dada la influencia positiva o negativa que podían generar estos medios. en ese sentido el comportamiento de los medios de comunicación estaba dividido, no todos comprendieron que estaba en juego la vida de los rehenes y el prestigio de nuestro país a nivel internacional y algunos medios demostraron su apoyo o simpatía por los terroristas en algunos casos y otros por su afán de llevar la primicia y lograr sus intereses económicos, esta situación en algunas ocasiones puso en riesgo el éxito de la operación, lo que obligo a establecer estrategias que minimicen estos riegos .
Esta victoria de las FFAA ante un grupo de terroristas del MRTA se dio en la tarde del 22 de abril, día histórico para todos los peruanos, porque nuestras fuerzas de elite lograron rescatar con vida a 71 rehenes de 72 que los terroristas tenían cautivos en la residencia del Japón; esa tarde del triunfo de la legalidad ante el terror, todo el Perú entero vivió estos acontecimiento y expresaron su agradecimiento a estos soldados de la patria y para con la patria, dignamente representados por hombres de la talla del coronel Juan Valer Sandoval y el capitán Juan Jiménez quienes no titubearon en brindar sus vidas en un acto de valor admirable para lograr el éxito de la misión, salvar otras vidas y darle la paz y tranquilidad al pueblo peruano liberándolo de este tipo de amenazas que solamente traen el retraso y malestar que afecta el crecimiento de nuestro país.
¡HONOR Y GLORIA A LOS HEROES DE LA OPERACIÓN CHAVIN DE HUANTAR!
Autor: General de Brigada EP Óscar Gallardo Olivet, docente facilitador de la Escuela Superior Conjunta de las Fuerzas Armadas.
Referencia:
Hermoza, N. (1998). Operación Chavin de Huantar. Rescate en la residencia de la Embajada del Japón. Lima, Perú.